lunes, 30 de noviembre de 2009

Jagger...y ese desconocido sitio donde trabajo


Es un dia que tardaré mucho tiempo en olvidar. Una tarde como cualquier otra en la Royal Society. Trabajando en preparar lo mejor posible cada habitación y cada rincón de ese edificio. Ese día sabía que saldríamos tarde, porque el presidente de la Royal tenía una cena VIP para 16 en su piso (un inmueble encuadrado en el mismo edificio con unas vistas increibles).
La cena no tenía nada de particular en principio, hasta que pude ver a mi Manager dando saltitos y riéndose de esa forma tan particular que lo hacen los alemanes.
Cuando me acerco...ni mis oidos, ni mis ojos, ni nada en mi cuerpo daban crédito a lo que escuchaba: "Tonight is coming Mick Jagger for the dinner" (Esta noche viene Mick Jagger a cenar)...
Se me pusieron los ojos como platos y se me plantó una sonrisa de oreja a oreja. Imposible...Jagger en mi trabajo... Una leyenda viva del Rock cenando con un puñado de eruditos.
Pero por desgracia, mi programación para ese día me iba a permitir pocos escarceos por el President´s Flat, así que me conformaría con tener la posibilidad de verlo pasar por la entrada...con mucha suerte.
Pero, la suerte, cambia, igual que cambia el viento...Y cuando subí a preguntar a Karoline por un Set up que tenía que montar en la Conference Room me dijo: - A las seis y veinticinco tienes que estar aquí, haras el Cloackroom (Guardaropa) y podrás ver a Mick Jagger-. Os juro que ahora me parece una estupidez, pero en aquel momento sentí la misma ilusión que un niño el dia de reyes. No era lo mismo que ver a otros famosos...Mick Jagger fue el espejo donde se miraron miles de rockeros...Los Rolling son cátedra del Rock & Roll y maestros de lo que hacen.
Yo era un súbdito más, esa noche afortunado...Con Karoline, Oscar y Vanessa como artífices de aquella jugada
Llegó la hora y allí estaba yo como un clavo a las seis y veinticinco recogiendo abrigos, bolsos y chaquetones...y Jagger no llegaba. Salieron los canapes y las primeras bebidas...Jagger seguía sin llegar...Pasó media hora...y ni rasto de su satánica majestad. Me asomé treinta veces al hall de la segunda planta...el ascensor se movía, pero nunca era Mick.
Karoline estaba a punto de mandarme para seguir con el trabajo...pero por otro lado, Oscar, se negaba y me decía que no me moviese de allí.
Una de las veces que me asomé al ascensor...le vi la jeta. Es feo y está viejo!! pensé...Volví de inmediato a mi puesto junto al perchero...Y al poco rató entró su señora (un bigarro de 1.90 por lo menos) y justo detrás...Mick...
Nos cambiamos una sonrisa y un Good Evening... Todo dentro de lo correcto. Cogió un vaso de vino blanco...
Me aflojé la corbata y volví al tajo...con una sonrisa...satánica...que ya nadie me podrá quitar.
Y es que por delante mia, había pasado la leyenda viva del Rock & Roll...
Ese día terminé tardísimo....pero valió la pena...
Al dia siguiente vino Stephen Hawkings...un genio...pero no me hizo tanta ilusión...Que le vamos a hacer...
Me gustan las ciencias...pero la música es otra cosa...
Por cierto, hoy ha salido mi trabajo en todos los periódicos de España...El Pais, el ABC, El Mundo...y es que "The Royal Society" ha cumplido 350 años...
Una pasada...
A tu salud Darwin...A tu salud...Lennon...
Mi saludo: A Jota...se que te hubiera encantado estar allí...y a Antonio F. "El Moscovita"...espero que te pases a menudo por esta, que es tu casa...
Chito

domingo, 22 de noviembre de 2009

Circos Caseros y despelucos de domingo...

Pues aquí estamos. Otra tarde de Domingo, en nuestro hogar de New Cross, donde todo se está convirtiendo en una rutina. Porque no salimos de aquí demasiado, la verdad, por aquello de estar a fin de mes. Pero somos felices, entre té y té y entre tostada y tostada.
Ayer estuvo Oscar en casa, se trajo su televisión y Vanessa nos sometió a una sesión de Sing Star de unas dos horas. También pasó Laura (Jerbo) por casa, nos comimos una pizza sin queso y unas copas de vino.
La noche dió para todo, hasta para fotos. La verdad es que aunque las condiciones técnicas eran carentes para la fotografía fue todo de lo más divertido. Y es que a pesar de ser unos tiesos integrales, nos lo montamos la mar de bien.
Cada vez queda menos para volver a España, más concretamente a Málaga...y más concretamente a Ronda. Y esa idea ya está perenne en mi cabeza, porque se echa mucho de menos a la familia y a los amigos y a toda la gente con la que has crecido y te has criado. Recibí una carta de Gema, con un libro del Rio Genal. Siempre da gusto recibir cosas desde España.

Y es que, si, puedo decir que estoy teniendo suerte. Aunque al principio todo fue duro, ahora las cosas vienen de cara. Estoy ganando bastante dinerito y la diosa fortuna parece que empieza a sonreir con cierta complicidad. Esa misma Diosa, que hace pocos dias daba por "missing" de repente empieza a aliarse conmigo y sacudirse sus pulgas en mi solapa. Y aunque me quedan 10 pounds para llegar al Viernes, no necesito nada más. Sólo suerte y que todo siga como hasta el momento. En casa no desaprovechamos una sola ocasión para reirnos y pasarlo bien...y en el trabajo siempre que es posible también lo hacemos. Y a fin de cuentas, eso es tener suerte, porque no se si en Londres habrá algún sitio o algún mercado en el que vendan sonrisas, pero supongo que por la cara que gasta aquí la gente...las sonrisas tienen que resultar caras.
Nosotros no...Los españoles sonreimos gratis, encantados y orgullosos.
Somos así...que le vamos a hacer...

Mi saludo: Pues va para mi hermana Pepi, mi cuñado Miguel y mis sobrinos Maite y Miguelito. Se que seguís el blog. Pronto nos veremos y brindamos con una cruzcampo...y una cenita de cualquier cosa. Lo dicho!!! Un beso enorme desde U. K.

Chito

sábado, 14 de noviembre de 2009

Visceras y Cubatas

Así van pasando estos dias. Una visita trajo a Vanessa una botella de Brugal, oscuro, delicioso...y a estas horas ya me he tomado dos cubatitas que me han sentado de lujo. Pequeños placeres y caprichos que son los que puedo concederme a estas alturas. El fin de semana, pasa lento...pero el lunes por la mañana parecerá que ha pasado volando. Esta noche hemos ido a comprar al ASDA unas cuantas cositas que necesitabamos en casa y a nuestro regreso nos hemos cocinado una pasta que ha salido la mar de rica. A Jaime, amigo de Merchi, le debo esa receta...Que me ha sabido genial. Aquí abajo, en la foto estoy liado con el sofrito de cebolla y bacón. Todo un placer.

Y eso es lo que está pasando. Todo se eviscera de una forma brutal para mí de un tiempo a esta parte. Todos los sentimientos para con la gente que tengo en España se vuelven intensos y en muchas ocasiones como hoy, me veo obligado a escribir mails o dejar mensajes en el tuenti a la gente diciéndoles cuanto los echo de menos o simplemente cuanto los quiero. No conozco el origen de esta vulcanización sentimental. Pero me gusta, porque a menudo me cuesta hacerlo. Me cuesta decirle "Te quiero" a la gente que quiero. Y eso no es justo para ninguna de las dos partes posibles. Aunque insisto en que no se la razón por la que esto pasa. Aquí soy tremendamente feliz con mi trabajo y mi ambientillo. Con esos pequeños placeres que en forma de sandwich asaltan mi vida. Hasta tener un ratón en nuestra cocina (tenemos fundadas sospechas) me gusta... entre otras cosas porque aquí lo de los ratones es como lo de los perros en España.
Ahora es más gratificante recordar aquellas sonrisas que me hicieron feliz, aquellas palabras que se me clavaron en el alma y esos momentos vividos con unos u otros de vosotros que jamás olvidaré y que a dia de hoy me dan fuerzas y ganas de vivir esta aventura londinense.
Aunque si os hablo con sinceridad estoy frito por volver a España y retomar durante mi mes de vacaciones parte de esa rutina diaria que allí tengo. Tomarme una caña en Los Arcos, ir con Luisito y Luigi a echar un futbito, charlar con Lirio, salir de tapas con Pedro Pablo, coinicidir en el campo con Castellón, fugarme a cualquier sitio con Ikki, Ardi, Merchi, Isa...
Y os juro que me encanta echaros de menos...y que no se porque extraño motivo, esos sentimientos se tornan viscerales e incomprendidos aquí.
Ha pasado una semana más...y otro dia...y después otro...y siento que poco a poco exprimo la vida en inglés y la baño con una buena taza de té calentito.
Lo demas es morralla...
Ustedes que están ahi detrás y me conocen...saben bien de lo que hablo...
Si no...no sería yo...claro está...sería otra persona...


También recibimos un par de latas de cruzcampo. Congelamos los dos vasos que Javi me regaló mi último dia en los arcos. y luego disfrutamos de ese cervezón. Si tuviera que ponerle precio a este momento...me faltarían ceros...
Y nada...me voy a poner a escuchar a Iker Jiménez un rato...
Os quiere, os estima, os echa de menos...y no os olvidará jamás...

Chito

miércoles, 11 de noviembre de 2009

four, five, three...to...Marylebone

Son las cuatro de la mañana en España. Acaba de empezar el "Si amanece nos vamos" y aquí me teneis sacándome casi literalmente un post de la manga. Y es que supongo que no me quedaré agusto hasta que no os cuente casi todo lo que llevo en mi maleta de viaje...en la maleta de las vivencias, experiencias y recuerdos.
Por lo general me levanto tarde. En torno a las doce de la mañana. Sé que no es una hora decente para un currito, pero la verdad es que luego me paso toda la tarde y parte de la noche trabajando sin parar. Por lo general me preparo un mugriento té para desayunar con unas tostadas de bimbo, untadas con cualquier mugre o simplemente recurriendo al eterno "sandwich mixto".
Me pego un duchazo, me afeito, acicalo y peino y una hora y media antes de mi entrada al curro me voy con más prisa que otra cosa para mi parada de bus. Allí cojo el 453, dirección Marylebone o el 53 que me deja en Horse Guards Parade. Me vale cualquiera de los dos.
Cuando te montas en el autobús es otro mundo. Suelo sentarme con mi inseparable mochila en el regazo después de pasar mi oyster por el scanner. Aunque todos los dias llevo el mp3 con música y con carnaval...la distraccion fundamental para mí es observar a la gente e imaginar como serán sus vidas: Chinos, negros, japoneses, indios, sudamericanos, algún que otro inglés y algún que otro español. Ese es el elenco fundamental de mi autobús. Una auténtica torre de babel indescriptible e indescifrable. Y más aún cuando se trata de un humilde barrio como el mio. El camino a traves de New Cross, Old Kent Road, Elephant, Lambeth hasta llegar a Westminster está plagado de tiempo perdido que empleo en pensar. En vosotros, en mi mismo y en esta aventura. Depende del dia y del ánimo saca uno unas conclusiones u otras.
Este diario paseo de 45 minutos acaba casi con la visión del Big Ben. Buque insignia de Londres que nos encontramos al paso del puente de Westminster justo a nuestra izquierda. Esta foto está hecha a las tres menos cuarto. Ese dia empezaba a trabajar a las tres y media. Una hora en la que el "londinense de pro" ya se ha tomado su English Classic Tea hace un buen rato. Yo supongo que iría pensando que en algunos hogares españoles todavía no habían puesto ni la mesa.
Mientras la gente, sigue con la mirada perdida en algún punto del autobús o del paisaje. Tristes, serios...por eso siempre que me acuerdo, procuro sonreir, por hacer algo diferente.

En la Royal, las horas pasan voladas. Mesa para acá, boardroom style por aquí, café para 75 por allá, Still and Sparkling para la Franklin room. Cada dia mi trabajo es diferente y eso es algo que un modo u otro acaba por agradecerse. De vez en cuando hacemos un break para fumarnos un cigarro. No más de un break diario por lo general. Fumamos en este sitio. La calle que se ve al fondo nos deja la estampa a su derecha del Palacio de Bakingham, con sus cambios de guardia y todas esas cuestiones de estado. Al final del dia todo es más repetitivo. Repasar los Set up, hacer el polish (sacar brillo a vasos y copas), revisar todo en orden al programa para el dia siguiente, limpiar los Pantrees (cocinitas pequeñitas, tenemos dos), cambiarnos, fichar...y salir por patas en buscar del autobús. El camino de vuelta a casa en el autobús es más diferente. La gente vuelve machacada de trabajar y toma la estupida decisión de dormirse. Decisión ésta que ha costado a más de uno llegar al final de la ruta del bus con la consiguiente pérdida de tiempo. Todavía no me he quedado dormido en el bus ni una sóla vez...y dudo que lo haga.
Me bajo en Marquis of Gramby. Allí procuro apretar el paso para estar en casa cuanto antes. Algunos dias me paro en una especie de hamburguesería y me compro unas patatitas de un pound (los únicos lujos que me puedo permitir para poder pasar la navidad tranquilo). Cuando llego a casa, con suerte, Vane y Pedro están despiertos y nos ponemos a charlar de como ha ido el dia. Es el único rato de vida contemplativa real...de relajarnos...
Porque a la mañana siguiente, como casi siempre, suena el despertador sobre las doce, indicándome que me quedan tres cuartos de hora para coger un autobús repleto de caras inanimadas y procurar sonreir...siempre y cuando me acuerde...
Pero descuidad, estoy contento...En verdad, estoy como loco...
Pero sin el como...


Trabajadores de la Royal fumando en el sitio indicado. De izquierda a derecha: (sentado) Pedrito, Javi de Alicante, Vane de Ronda y un tipo feo y mal vestido que necesita un pelado y un afeitado como el comer...
Al tio no lo conocemos de nada...
Cruzcampo...que palabra tan bonita...

Chito

domingo, 8 de noviembre de 2009

Ya mismo es Navidad

Hace fresco en Londres cada dia más. Perdonad ante todo la tardanza. Mi trabajo no me deja mucho tiempo para actualizar esto y la verdad es que los dias pasan con cierta rutina que te hacen vivir las horas con cierta indiferencia...pero eso sí, con la misma pasión del primer dia. En mi trabajo consigo poco a poco ser más autónomo cada vez y hacer las cosas que me mandan más rápido y mejor. Adaptarse sólo era cuestión de tiempo. Lo de la corbata, aquí, igual que cuando estaba en la tele, lo llevo más regular. Pero bueno, son normas y hay que cumplirlas.
Este fin de semana hemos tenido visita en Londres y terminamos en casa de Oscar comiendo Fritata. Uno de esos platos imposibles y exquisitos. Me acordé de Castellón porque llevaba todo el forraje posible. Patatas, Pollo, pimientos, huevos...Absolutamente exquisito.
Luego unas copas y unas risas que a todos en cierto modo nos hicieron olvidar el dia a dia. El fin de semana sirve para eso...y lo fundamental es desconectar del trabajo y de todo.
Todavía no he salido ni un solo dia. Mi economía sigue en proceso de recuperación y afortunadamente cada dia presenta mejores rasgos vitales.
Son las dos de la mañana de Londres y Pedrito se va a dormir ya. Vane está acompañando a Victoria St. a su visita.
Esta foto la hice ayer desde casa de Oscar. 15 segundos de exposición y 4.5 de apertura fueron suficientes.

Esta mañana, con las mismas caras que tenían los zombies del videoclip thriller nos hemos levantado y hemos emprendido el largo camino que une Berthnard Green con New Cross. A pesar de todo, el viaje me ha sentado bien. Sobre todo esas esperas en las paradas de autobús que te permitían que el frio de Londres despabilara los sentidos casi adormecidos por una noche de muchas copas y de mejores risas.
Vuelvo a España el dia 15 de Diciembre y me quedaré por allí como un mes. Ese tiempo la Royal andará menos "busy" y será posible vivir las navidades enteritas en España. En verdad, después de todo este tiempo en la ciudad de las prisas y los peatones locos, lo que más me apetece es sentarme delante de la chimenea de mi casa de Jimera a ver las horas pasar delante de un libro. Pasear por la orilla del Guadiaro. Ir al Bar de Paul a tomarme una caña...o simplemente tumbarme al más tímido sol del otoño para no hacer nada.
El desgaste no es mucho, pero es contínuo. Y la añoranza no asalta, pero da pasitos...
Aunque todo esto, creedme, sigue mereciendo la pena con creces.
Me voy a dormir...Que no es poco...

Mi Saludo: A Carmelo, porque a pesar de sus cortas luces y de su "oportunismo", sigue siendo uno de esos tipos insustituible con los que me gusta tomar cerveza y hablar hasta las claras del dia. A Txus y a Desiree, porque los echo de menos y estos últimos meses hemos vivido muchas cosas juntos. A Pepi, recupérate pronto y que no sea nada...

Chito